El internet está justamente indignado después de que un pastor obligara a una joven a subir frente a la congregación y disculparse por haberse quedado embarazada fuera del matrimonio. Tras su breve disculpa, el pastor añadió que no merecía un baby shower y ordenó a la congregación que no asistieran a ninguno en secreto.
Lo único que faltó fue que el pastor Terry W. Jackson le colocara una letra escarlata al cuello.
El vergonzoso incidente ocurrió el domingo en la iglesia True Vine Apostolic Church of Christ en Hampton, Virginia, y fue transmitido en vivo por Facebook.
El momento humillante
JACKSON: Antes de continuar, la hija de la Hermana Miles quiere dirigirse a la iglesia en este momento, en el nombre de Jesús. Ven, hermana…
CHICA: Alabado sea el Señor, santos.
JACKSON: Párate justo frente a la congregación…
CHICA: Quiero disculparme con todos aquí porque estoy embarazada… Lo siento, todos. Solo espero que todos me perdonen y oren por mí.
[Applausos]
JACKSON: La iglesia está orando por ti. Ahora, no vamos a aprobar tu pecado. No vamos a hacer eso. No habrá baby showers. Eso es lo que pierdes… Cuando tienes un bebé fuera del matrimonio, no hay baby showers. Nadie en esta iglesia debe asistir a uno. Tu mamá tampoco debe tener uno. Ella tiene que cuidar a su nieta, pero no puede aprobar el pecado. No habrá baby shower privado. No puede haber baby shower. Pierdes todo el premio y la gloria. Pierdes todo eso. Gracias a Dios que Dios no te quitó la vida.
La reacción del internet
El internet se encendió de indignación, y muchos comentaron que este tipo de comportamientos representan lo peor de la cultura eclesiástica. La mayoría de las personas no creyeron que la joven se disculpara voluntariamente, argumentando que la presión y coacción en un entorno religioso son siempre muy poderosas.
Un detalle que no pasó desapercibido fue el doble estándar. La joven fue avergonzada públicamente por estar embarazada fuera del matrimonio, pero no se mencionó nada del hombre responsable. ¿Por qué él no tuvo que disculparse ante la iglesia?
Moralidad religiosa e hipocresía
Este incidente expone un problema común con la llamada “moralidad” religiosa: la gente en estas iglesias no es más moral que los demás, pero insisten en actuar como si lo fueran. Guardan su ira para aquellos cuyo “pecado” es visible, como esta joven, mientras ignoran las hipocresías internas.
El mensaje implícito que esta iglesia está enviando es perturbador: las mujeres jóvenes estarían mejor terminando sus embarazos en secreto que enfrentando la humillación y el juicio público de su comunidad religiosa.
Reflexión final
No se trata solo de esta joven. Se trata de la iglesia, la hipocresía, la vergüenza y la crueldad innecesaria que la religión puede generar. Es un recordatorio de cómo el dogma puede interponerse en el camino de la decencia humana.
Este incidente debe servir como ejemplo de lo que las iglesias verdaderamente compasivas deben evitar. En lugar de desperdiciar tiempo intentando cambiar lugares como este, es más estratégico resaltar su hipocresía y trabajar para construir comunidades donde la empatía y la dignidad prevalezcan.
